La ola de calor de los días pasados impactó tanto en la realidad de los ciudadanos como la agenda mediática. Con marcas máximas históricas a lo largo de la semana, fueron muchos los inconvenientes que se debieron sortear.
En el centro de los padecimientos y la polémica están los cortes de luz, que dejaron durante muchos días un promedio de más de 70.000 hogares durante varias horas sin poder refrigerarse ni contar con agua corriente en el AMBA.
Son muchas las recomendaciones que se dan para poder enfrentar tanto el excesivo calor como los cortes, y no escasean las polémicas, como por ejemplo las de diferentes distritos y el enfoque nacional por el hecho de que los empleados, que estén en condiciones de hacerlo, trabajen desde sus casas.
Cortes y coberturas
Lo cierto es que los cortes de luz en particular pueden dañar los artefactos eléctricos, y en algunos casos dejarlos inutilizados. Ante estas pérdidas, existe la posibilidad de reclamar a las empresas proveedoras de energía y los organismos que las regulan
También hay casos donde tanto los artefactos eléctricos como los equipos electrónicos se encuentran asegurados. Existen, de acuerdo con información proporcionada por Grupo Gaman, distintas coberturas que dan respuesta a estos daños.
Para el caso de las viviendas particulares, los seguros de Combinado Familiar ofrecen coberturas de todo riesgo para equipos electrónicos, y determinadas aseguradoras amparan los daños producidos a los equipos eléctricos como consecuencia de sobre tensión y también los perjuicios ocasionados por la pérdida de alimentos, obviamente en todos los casos con sus respectivas limitaciones.
Para el caso de las PyMEs e industrias, coberturas similares son contempladas en los planes de Seguros Integrales, Seguro Técnico o Todo Riesgo Operativo, más allá de los específicos para determinadas actividades, como podría ser la pérdida de mercadería por falta de frío.
Otra de las coberturas afectadas por los intensos calores es precisamente la de Incendio, que puede incidir indistintamente en viviendas particulares, comercios, industrias, campos, etc. Allí el asesoramiento profesional, tanto desde el punto de vista de la prevención como de los alcances de las coberturas más adecuadas, según lo indicado por Grupo Gaman, es fundamental para evitar pérdidas, a veces irrecuperables.
Prevenir o curar
“Como suele pasar en el mercado argentino, muchas veces la gente corre detrás del problema, por lo que ante este tipo de situaciones las consultas siempre aumentan”.
En ese sentido, remarca: “Los particulares no le suelen dar mucha importancia a este tipo de pólizas, muchos tienen productos enlatados asociados a una tarjeta de crédito o a entes financieros, donde las coberturas y los valores asegurados no responden a las necesidades reales de estos clientes”.
En el caso de PyMEs e industrias, de acuerdo a la ejecutiva de Gaman, el uso de estas coberturas resulta más habitual, más allá de los contextos específicos como la ola de calor reciente.
Fuente: 100% Seguro